Se trata de la única isla habitada de la Comunidad Valenciana y, con tan sólo 1.800 metros de largo y 400 de ancho, cuenta con todo lo necesario para hacer de tu visita algo inolvidable.
Esta pequeña isla de calles empedradas, fachadas blancas y puertas de colores tiene un encanto especial, ya que mantiene la esencia de sus orígenes. Durante siglos, Tabarca fue refugio para los piratas que atacaban la costa alicantina, hasta que en el siglo XVIII el rey Carlos III decidió repoblarla con pescadores genoveses liberados de la isla tunecina de Tabarca (de donde proviene su nombre). Se construyó entonces una ciudad amurallada con un diseño defensivo. Actualmente, todavía se conservan las murallas, la Puerta de San Rafael o la Iglesia de San Pedro y San Pablo.
En 1986, Tabarca fue declarada la primera Reserva Marina de España por sus fondos marinos repletos de posidonia oceánica, caballitos de mar, morenas, sepias y una gran variedad de peces, lo que la hace un lugar ideal para practicar snorkel y buceo. Otro de los grandes atractivos de Tabarca son sus idílicas calas, auténticos rincones de paz donde disfrutar del mar y volver a conectar con lo esencial. Pese a lo reducido de su tamaño, la isla cuenta con una gran variedad de calas, por lo que podrás elegir la que más se ajuste a tus gustos y al plan que quieras hacer. Te contamos un poquito sobre cada una de ellas:
Si te apetece bucear o hacer snorkel, la Cala de la Guardia o la Cala Punta del Falcó te encantarán. La Cala de la Guardia cuenta con la Cova del Llop Marí, una pequeña cueva marina que antiguamente albergaba focas monje. La Cala Punta del Falcó, que se encuentra en la zona de máxima protección marina, es la más salvaje y cuenta con túneles y cuevas submarinas. Un paraíso para los buceadores.
Si prefieres relajarte disfrutando del paisaje, la Cala dels Birros es para ti. Se trata de una de las calas más bonitas de la isla.
Si buscas aguas de color turquesa y mucha tranquilidad, Cala de la Cantera es ideal para disfrutar del mar.
Si lo que quieres es algo más íntimo, la Playa Panxón y la Cala de la Mina son perfectas para escapar del ruido y descansar.
Si prefieres una playa con algo más de comodidad, la Playa Central ofrece servicio de hamacas, socorristas y chiringuitos.
Sea cual sea tu elección, la Isla de Tabarca es un pequeño paraíso que no dejarás de disfrutar. Y como desde Roomelx nos encanta disfrutar de las experiencias al completo, te aconsejamos no irte de la isla sin probar su caldero de Tabarca, un arroz meloso con pescado que puedes degustar en restaurantes como Amparín, Gloria, Los Pescadores o Casa Ramos… y sin disfrutar de su atardecer. ¡El paraíso está a tan sólo unos minutos de Elche!
Contenidos en este artículo
Toggle¿Cómo llegar a Tabarca?
Lo más sencillo es ir en coche o autobús a Santa Pola, y luego coger un ferry o catamarán desde allí. El trayecto dura entre 15-20 minutos y hay salidas frecuentes durante todo el día. También puedes coger una lancha rápida que te dejará en la isla en 15 minutos.
¿Cuánto tiempo se necesita para ver Tabarca?
Se trata de una isla pequeña, por lo que puedes visitarla en tan sólo un día… ¡o quedarte a dormir y disfrutarla sin prisas!
¿Qué necesitaré en mi visita a Tabarca?
Te recomendamos llevar escarpines, ya que muchas calas son de roca, gafas de buceo para disfrutar del fondo marino, una sombrilla (ya que no hay mucha sombra en la isla) y protección solar para protegerte del sol.